Pídeme lo que quieras, o déjame es una intensa y atrevida historia de amor, plagada de morbo y erotismo, en la que los protagonistas luchan por preservar su relación, a pesar de que el precio que tendrán que pagar por ello puede ser demasiado caro. La aclamada Megan Maxwell concluye de este modo una de las sagas eróticas más populares de nuestro país.
La verdad es que he disfrutado muchísimo con esta última parte, a
pesar de que mucha gente la a visto innecesaria o incluso de relleno,
para mi que soy una apasionada de la romántica me ha encantado saber
como sigue la vida de Judith y Eric, dos personajes que han conseguido conquistarme desde el inicio de la historia.
Los personajes se han quedado estancados. Judith
sigue en su trece, continúa siendo la chica rebelde y alocada que
conocemos desde el principio. Aunque en esta última parte en especial,
la he encontrado algo insoportable y fuera de si.
Reconozco que en momentos de la historia, me ha llegado a saturar, no
entendía ni sus comportamientos, ni sus maneras de actuar la verdad.
Eric ha conseguido conquistarme
definitivamente, a pesar de seguir en su misma línea de celoso y
posesivo, conocemos su lado oculto, el hombre cariñoso, atento y
detallista con su familia, y en especial con Judith.
Bjorn
por su parte ha pasado a tener un papel mucho más importante, ha dejado
de ser un personaje secundario, a dar mucho más juego dentro de la
historia. La autora nos ha querido dar un pequeño aperitivo de lo que
nos vamos a encontrar en su próxima lectura, donde será el personaje
principal.
Las relaciones sexuales entre ambos continúan siendo el
plato fuerte de la historia, aunque por algunos acontecimientos que
ocurren sus practicas disminuyen con bastante frecuencia. Sigo sin
compartir sus gustos, no llego a entender sus aficiones a compartirse
con otras personas, y menos con los sentimientos tan fuertes que tienen
entre ambos. Supongo que en la variación está el gusto, pero vamos que
en ningún momento lo comparto con ellos.
Hay algo por lo que se caracteriza a Megan y es por su sencillez, su naturalidad a la hora de escribir y sobre todo la magia que consigue con sus historias. Y es que a pesar de contener un sin fin de páginas, me he leído el libro en un abrir y cerrar de ojos.
La serie me gusto, pero creo que en el segundo es donde debería haberse quedad, alargar un libro más aunque lo he disfrutado creo que ha sido un error.
ResponderEliminarGenial reseña
Besos wapii
No he leído aún ningún "Pídeme..." de Megan porque el género erótico no me va, pero me gustaría realmente coger aunque sea sólo uno para ver cómo se desenvuelve en esta faceta (en Chick-lit y en Histórico ya he tenido el placer, y es maravillooooosa !). Besos !
ResponderEliminarNo me llama nada esta trilogia, ni he leído nada aún de Megan >.<
ResponderEliminarLa verdad es que me quedé en la mitad del primero porque no me lleno. Gracias por la reseña.
ResponderEliminarBesos
Maldita sea... xDD
ResponderEliminarQuiero leerlo, tengo muchas ganas DD:
Un beso^^
hola!
ResponderEliminarle tengo mil ganas a la trilogía!
La verdad es que este libro era innecesario :S!
ResponderEliminarUn beso.
He leído muy buenas reseñas de estos libros pero a mí la érotica dejó de llamarme a los 14 años xD
ResponderEliminarTe sigo!
Besos desde Neverland